Unos nacen con estrella... y otros estrellados!

HISTORIA: 10/01/07
Timy sólo tenía 2 años y una historia muy triste a sus espaldas. Lo compraron de cachorrito para satisfacer un capricho y a los pocos meses se cansaron de él y lo regalaron sin mirar mucho a quien, los nuevos dueños a su vez volvieron a regalarlo y con éstos últimos Timy pasó un año encerrado en una terraza día y noche, sin asistencia veterinaria, sin que nadie cuidara su precioso pelo, sin recibir apenas comida ni cariño. Un vecino nos avisó del estado lamentable en que se encontraba el perro. Él le echaba comida al balcón dónde estaba porque le daba pena y hacía días que el perrito intentaba comer y no podía , el vecino le oía gemir de dolor cada vez que intentaba tragar la comida de lata que le daba. Fuimos a ver a los dueños de Timy y nos lo enseñaron. El aspecto que presentaba el animal era realmente penoso, sólo era piel , huesos y suciedad. Tenía legañas verdes en sus tristes ojos, el pelo lleno de nudos y con caspa y olía muy mal. Nos dijeron que estaba así de flaco (apenas pesa 6 kilos) porque hacía días que llevaba atravesado un hueso en el paladar que le impedía ingerir alimentos y que lo habían llevado al veterinario pero no se lo habían podido sacar. Les pedimos que nos dejaran llevar al perro al veterinario y nos lo permitieron. En menos de un minuto le sacaron el hueso sin la menor dificultad y en la clínica dónde dijeron que lo habían llevado nos comentaron que allí no lo habían atendido... Es decir, no se habían molestado en llevarlo, como tampoco se habían molestado nunca en lavarlo, cepillarlo, sacarlo pasear y pensamos que ni en darle de comer (lo alimentaban los vecinos) Le hicimos análisis y se confirmaron nuestras sospechas... Tiene leishmania y le ha afectado al riñón y necesita medicación y comida especiales. El chip del perrito estaba a nombre del primer dueño por lo que le llamamos y le contamos la historia. Dijo que no se lo devolviéramos a quien lo tenían ahora que él se haría cargo, pero cuando el veterinario le comentó que tenía que tratarlo de la leishmania decidió sacrificarlo. Ahora le estamos buscando un dueño a este pobre, porque merece una oportunidad de ser feliz después de lo que ha pasado. La primera noche durmió en el albergue sobre una esterilla eléctrica en vez de acurrucado en el frío suelo del balcón. Cenó dos latitas (tenía muchísima hambre) y el albergue le debió de parecer el paraíso. Si le acercábamos la mano apoyaba su cabecita en ella. No ladra, no protesta por nada, se dejó hacer todo en el veterinario (sacar sangre, meter los dedos en la boca ..) sin moverse... es muy dócil y nos sigue sumiso y confiado... Aún confía en las personas a pesar de todo.

SU REALIDAD TRAS TRES MESES EN LA PROTECTORA:
Timy es un perro muy, muy alegre y juguetón. No para quieto un instante, es muy sociable y cariñoso con las personas, con otros perros (machos y hembras) y con gatos. No da ningún problema. Actualmente está en una casa de acogida donde tienen un perro y tres gatos, así queestán un poco agobiadillos con tanto animalillo. Durante estos dos meses le hemos tratado de sus enfermedades, de las que poco a poco se ha ido recuperando. En poco tiempo sólo necesitará tratamiento para la leishmania. La leishmania es una enfermedad crónica, transmitida por la picadura de un mosquito. Por lo que no es contagiosa, entre perros ni ningún otro animal. Ni siquiera puede transmitirse a los humanos. Los perros pueden hacer una vida totalmente normal. Timy es un torbellino de vitalidad y energía, que transmite a los que estan con él. En las fotos sale también dormidillo, tras jugar con sus peluches y con todos los que estábamos con él, no desprecia a nadie. Tanto gasto de energía no nos extraña que lo deje agotado!! La primera foto es de cuando llegó al albergue hace dos meses. Pesaba 6 kilos... ahora pesa 11 kilos, imaginad la mejoría y sus ganas de vivir. Su pelo estaba enmarañado, nunca lo peinaron ni (casi estamos seguras de ello) lo lavaron; así que lo tuvimos que rapar.... ya lo véis en las fotos, donde posa de lo más desenfadado. Tiene 2 años, es muy joven y aún tiene muchas ganas de jugar. Por favor, necesitamos con urgencia una casa para él . No podemos dejar que no conozca lo que es vivir en un hogar donde le den cariño de verdad
TIMY: 8 DE JULIO DE 2009
El pobre Timy parece que no va a tener suerte nunca. La familia que lo adoptó no lo puede tener por más tiempo por lo que busca de nuevo hogar. Ahora tiene casi 5 años y sigue siendo un perro cariñoso y sociable, tanto con las personas como con sus congéneres perrunos. TIMY QUIERE ENCONTRAR A SU FAMILIA, ¿ERES TÚ? Por favor ayudad a TIMY: info@protectora-jaca.org